Recomendaciones para mejorar el funcionamiento del Instituto de Pensiones del Estado (IPE)

Resumen

Nadie conoce la verdadera situación financiera del IPE, no está quebrado, pero si vive una situación de riesgo de quiebra, del cual se intentó salir con la reforma a la ley, de 1996 que se enfoco principalmente a incrementar las cuotas y aportaciones de los trabajadores y gobierno, el uso separado de las mismas por generaciones, la cual no fue suficiente y motivó que en 2006 se hiciera una nueva reforma que dotara al IPE de otras fuentes de financiamiento con la idea de reducir el creciente déficit que ahoga sus finanzas al no permitirle ahorrar el pago de los futuros jubilados. Pero ninguna de estas reformas se enfocó a mejorar la función administrativa, a identificar las causas que están generando esta situación negativa en sus finanzas corto efectivamente quebrará. El objetivo de este trabajo es hacer una serie de recomendaciones administrativas que complementen y eficiente las propuestas de las reformas de 1996 y 2006 que buscaban darle una larga vida al IPE, enfocadas principalmente a dotar oportunamente de todos los ingresos que marca la ley, cambiar su forma de invertir los fondos de los fideicomisos, coordinen el funcionamiento de todas las subdirecciones y la reducción de sus costos de operación, teniendo como prioridad la identificación de nuevas fuentes de financiamiento interno y sobre todo cambiar la forma de nombrar al director del Instituto.